Si se trata de una obra menor de un particular, se consideran residuos municipales, y se pueden gestionar a través de los puntos verdes, siempre que las ordenanzas del municipio lo permitan. En caso de que el ayuntamiento no lo acepte, o si hay que manipular materiales que contienen amianto, se debe contactar con una empresa autorizada.

No abandonar nunca este residuo ni lo deposite en los contenedores de la calle, ya que esto supone un riesgo para el medio ambiente y para nuestra salud.

Más información