13 mayo 2022 Consejería de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática

El Govern inicia los trabajos de exhumación del cementerio de Mancor de la Vall para buscar los restos de Adolfo Quesada NNota Informativa

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El Govern inicia los trabajos de exhumación del cementerio de Mancor de la Vall para buscar los restos de Adolfo Quesada

El vicepresident Yllanes ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para solicitar información de la víctima, asesinada extrajudicialmente por milicias falangistas el 5 de septiembre de 1936, y a quien no se le conocen familiares

El vicepresident del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, ha inaugurado este viernes los trabajos de exhumación del cementerio municipal de Mancor de la Vall, una intervención que se focalizará en la búsqueda de Adolfo Quesada Ripoll, única víctima de la que se tiene constancia que permanezca enterrada en la fosa común del cementerio de Mancor. 

«Lo que queremos es recuperar la memoria y la dignidad de quienes fueron asesinados simplemente por discrepar con quienes dieron un golpe de estado contra el régimen legítimo de la II República», ha dicho Yllanes

La intervención se enmarca en el Tercer Plan de Fosas (2021-2022) que impulsa el Govern de las Illes Balears y se llevará a cabo a lo largo de esta próxima semana, durante la cual se realizará un sondeo de 3x3 metros en la esquina noroeste del cementerio antiguo, exactamente en el primer cuadrante de la derecha del recinto original del cementerio, a tres metros de la entrada.

Las diligencias abiertas sobre el asesinato de Adolfo Quesada y recogidas en la causa judicial 402/1936 apuntan a este espacio como posible lugar de enterramiento de la víctima. Además, según la ficha correspondiente del Mapa de Fosas de Mallorca, parece que esta ubicación no ha sufrido grandes cambios desde el momento de los hechos, o al menos cambios que pudieran afectar a la fosa.

No obstante, cabe la posibilidad de que, en el transcurso de las obras de adecuación del patio del cementerio antiguo, realizadas entre 1987 y 1988, se afectara la fosa y en consecuencia a los restos. «Sólo excavando la localización originaria, la más probable, se podrá confirmar la hipótesis sobre el paradero de los restos de Adolfo Quesada», ha explicado Almudena García-Rubio, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

Desde la Vicepresidencia y el Ayuntamiento se ha querido hacer además un llamamiento a la ciudadanía con el objetivo de localizar a la familia de Adolfo Quesada, o a personas cercanas, que puedan aportar información sobre la víctima a quien no se le conocen familiares.    

De hecho, la principal fuente de información sobre Quesada es la extraída de la documentación oficial de la época y, en concreto, de las diligencias abiertas sobre su asesinato. Éstas recogen, además del detalle de su inhumación en el cementerio de Mancor de la Vall, datos sobre su persona y sobre las circunstancias del asesinato y del hallazgo e identificación del cadáver: Adolfo Quesada Ripoll habría sido asesinado extrajudicialmente por milicias falangistas el 5 de septiembre de 1936 en el olivar de Ca’n Ripoll, a medio camino entre Inca y Mancor de la Vall. Su cadáver fue localizado en la finca de Son Mague, identificado por su hermano político, Miquel Salom Pol, y posteriormente inhumado en el cementerio municipal.

El alcalde de Mancor de la Vall, Guillem Villalonga, por su parte, ha mostrado la total disposición del Ayuntamiento «a colaborar, en todo los posible, para retornar la dignidad a todas las personas desaparecidas».

Causa Judicial 402/1936, clave en la posible identificación de la víctima

Según la causa judicial 402/1936 que investiga el asesinato de Adolfo Quesada y abierta a raíz del «hallazgo» de su cadáver, éste habría sido localizado en la noche del 4 al 5 de septiembre de 1936 por un grupo de falangistas de la zona en la finca de Son Mague, en Mancor de la Val. Habían ido «a investigar» tras haber «oído dos disparos».

Su cuerpo fue identificado por varios testigos -entre ellos su hermano político, el vecino de Biniamar, Miguel Salom Pol- y trasladado al cementerio municipal de Mancor de la Vall donde los médicos le practicaron la debida autopsia. 

Ésta certificó su muerte a causa de dos heridas de arma de fuego en la cabeza, tal y como se especifica en la documentación oficial:

[...] resultando que practicada la autopsia se apreciaron dos orificios producidos por arma de fuego con orificio de entrada en la región de la nuca y salida en el frente y el pómulo izquierdo.

La causa señala, además, que la víctima:

[...] tenía en su posesión un llavero sin llaves, un pañuelo de bolsillo, una petaca vacía, un filtro y un mechero. Vestía con camiseta blanca, pantalones azules y alpargatas.

Posteriormente, su cadáver sería inhumado en una fosa abierta ex profeso a la entrada del cementerio. En concreto, la causa expresa textualmente:

En el cementiri municipal de Mancor de la Vall, a cinc de setembre de mil nou-cents trenta-sis, el senyor jutge instructor, acompanyat del meu secretari, i presents els metges que varen practicar l'autòpsia, va ordenar la inhumació del cadàver col·locant-lo en una fossa oberta a tal objecte i a uns tres metres a la dreta de l'entrada a aquest cementiri, amb les robes posades, quedant el cap cap al nord i els peus cap al sud.

Toda esta información jugará un papel clave ante la posible identificación de la fosa y de la víctima.     

Adolfo Quesada Ripoll

Según la información recogida en la causa judicial 402/1936 y aportada por los testigos, Adolfo Quesada Ripoll, se decía de Ca’n Fèlix. Tenía 33 años, era zapatero y estaba casado con Antònia Villalonga Coll, de 25 años, natural y vecina de Biniamar con seis hermanas. No tuvieron hijos. La única familia conocida por parte de Adolfo son sus padres, Félix y María. 

Otras fuentes señalan que era hijo de carabinero y miembro de UGT, del sindicato de zapateros de Inca ‘la Justicia’ y del sindicato anarquista CNT.

El Tercer Plan de Fosas del Govern

El tercer Plan de Fosas del Govern de las Illes Balears fue aprobado en diciembre de 2020 para realizar las tareas de excavación, exhumación e identificación de cuerpos en siete fosas de las Illes Balears.

Las primeras intervenciones han sido: la segunda fase de exhumación del cementerio de Son Coletes, en Manacor; la intervención en el cementerio de Inca, también en Mallorca, la tercera fase de exhumación del cementerio de Ses Figueretes, de Eivissa; y la exhumación del cementerio de Sant Francesc en Formentera.

Tras la excavación del cementerio municipal de Mancor de la Vall, las siguientes intervenciones previstas son el cementerio de Selva, que se llevará a cabo previsiblemente en las próximas semanas, y el Pou de Son Danús, en Santanyí.

Dichas actuaciones las ejecuta la Sociedad de Ciencias Aranzadi, siguiendo el calendario aprobado por la Comisión Técnica de Desaparecidos y Fosas de las Illes Balears.

El Plan se completa con la realización de seis estudios históricos llevado a cabo por la empresa ATICS, SL, y que se centrarán en la fosa común de Capdepera; el cementerio de Petra; el cementerio de Palma (calle de Sant Silvestre); el cementerio de Porreres; el cementerio de Muro, y la fosa de Cala Sant Vicenç, situada en Pollença.

También es ATICS la empresa responsable de llevar a cabo los trabajos de restauración, consolidación y conservación de los materiales u objetos encontrados en el proceso de excavación y documentación de las fosas exhumadas en los anteriores planes de exhumación de 2016, 2018 y 2019.