28 julio 2022 Consejería de Medio Ambiente y Territorio

El Consejo Balear del agua da el visto bueno a la revisión del tercer ciclo del Plan Hidrológico NNota Informativa

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El Consejo Balear del agua da el visto bueno a la revisión del tercer ciclo del Plan Hidrológico

El instrumento de planificación hidráulica condiciona, por primera vez, los futuros crecimientos urbanísticos al logro de objetivos en materia de disponibilidad del recurso

El conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, ha presidido, este miércoles, el Consejo Balear del Agua, que ha informado favorablemente del tercer ciclo de planificación (2022-27) del Plan Hidrológico de las Illes Balears (PHIB). El documento será enviado al Consell de Govern para su aprobación inicial y remitido, posteriormente, al Ministerio de Transición Ecológica que lo tendrá que aprobar en Consejo de Ministros.

Mir se ha mostrado «muy satisfecho» de haber superado «un paso decisivo en la tramitación de una herramienta fundamental para garantizar la suficiencia hídrica del archipiélago los próximos años». El conseller ha destacado, por ejemplo, que este nuevo ciclo de planificación «apuesta por la reutilización como prioridad principal» y «fija unos objetivos muy claros a todas las administraciones para mejorar la eficiencia en la gestión del ciclo integral del agua».

En este sentido, Mir ha destacado que «por primera vez, los futuros crecimientos urbanísticos estarán vinculados al cumplimiento de objetivos en materia de suficiencia hídrica». Así, el informe de suficiencia hídrica, que es obligatorio para poder tramitar cualquier instrumento que pueda suponer un crecimiento urbanístico (PGOU, Normas Subsidiaries, Pla Especial, etc., sólo podrá ser favorable en caso de que el municipio que lo solicita cumpla con dos condicionantes: una dotación máxima de 250 litros/persona/día y un porcentaje máximo de fugas del 25% (el 2025) y del 17% (el 2027).

En caso de no cumplir con estos dos condicionantes, solo se podrá seguir con la tramitación si el municipio ya tiene aprobado un Plan de Gestión Sostenible del agua donde se prevea el logro, como mínimo, de estos dos objetivos, en un periodo máximo de seis años. Con todo, según ha remarcado el conseller, «cumplir con estos condicionantes no supone automáticamente obtener un informe de suficiencia hídrica favorable sino que, una vez superado este requisito mínimo, se examinará la viabilidad del crecimiento requerido».

La directora general de Recursos Hídricos, Joana Garau, ha señalado, por su parte, que «este tercer ciclo de planificación pone el foco en la optimización de la gestión del recurso» teniendo en cuenta que «el incremento del recurso disponible solo sería posible ampliando el número de desaladoras lo cual supone un coste ambiental y energético inasumible para el archipiélago». Garau ha destacado, en este sentido, que proyectos emblemáticos como la renovación de la desaladora de Palma no supondrán un incremento de la capacidad de producción de la planta sino una mejora de la eficiencia energética. Finalmente, ha incidido en la importancia de cumplir con los objetivos de reducción de fugas en las redes de suministro. «En un contexto de reducción de las precipitaciones, tenemos que estar preparados para aprovechar la última gota de agua, no nos podemos permitir perder el agua como se nos pierde actualmente», ha señalado.

Mir ha recordado, finalmente, que esta revisión del Plan Hidrológico «es la primera desde la declaración de emergencia climática en la comunidad autónoma» y que, en este sentido, «se ha puesto énfasis a incorporar la visión climática al Plan». Así, por ejemplo, Mir ha destacado el compromiso de crear una Estrategia de mantenimiento y recuperación de zonas húmedas, el establecimiento de caudales ecológicos o el incremento de la protección de las zonas inundables.

El Consejo Balear del agua es el órgano supremo de consulta, participación y planificación en materia de aguas en el ámbito de las Illes Balears. están representados el Govern, los consells insulares, la Federación de Municipios, la administración del Estado, subministadores y gestores de agua y los sectores ecologista y agrícola, entre otros.