20 mayo 2021 Consejería de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática

El Gobierno presenta las conclusiones del informe final del proyecto Costas por el Cambio NNota Informativa

Foto de noticia
Descarga de imágenes en alta calidad

El Gobierno presenta las conclusiones del informe final del proyecto Costas por el Cambio

El vicepresidente Yllanes y el conseller Mir destacan el trabajo que está haciendo el ejecutivo para adaptar las Illes al cambio climático y blindarlas climáticamente

El vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, y el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, han presentado este jueves las conclusiones del informe final del proyecto Costas por el Cambio, que muestra los resultados del informe de riesgos en la costa ante el cambio climático en el ámbito de la comunidad autónoma de las Illes Balears y evalúa la vulnerabilidad y la exposición de activos naturales y socioeconómicos frente al ascenso del nivel del mar y el régimen extremo asociado.

A la presentación también han asistido el director del SOCIB, Joaquin Tintoré, y el investigador de la UIB el Dr. Lluís Gómez Pujol, en representación de los miembros del equipo científico que han coordinado y desarrollado el informe de riesgos.

El vicepresidente Yllanes ha declarado que «este trabajo ayudará a la planificación de medidas de adaptación de los efectos de cambio climático en las zonas costeras de las Illes Balears». «Quiero recordar que el Govern ya ha aplicado medidas para poder adaptarnos al cambio climático, y quiero recordar que fuimos pioneros en tener una ley de cambio climático, una ley ambiciosa y que tiene como objetivo blindar climáticamente las Illes Balears y que también declaramos las Illes en emergencia climática».

«Sabemos que lo que viene nos afectará a todas y a todos, y es por ese motivo que no solo nos sirve acelerar la transición energética como estamos haciendo ya, sino que tenemos que ser capaces de adaptarnos a los efectos que ya estamos viviendo y que en las próximas décadas se acentuarán», ha añadido Yllanes, a la vez que ha destacado que este Govern está haciendo una apuesta «clara y evidente por la descarbonización de las Illes, la reducción de emisiones de CO2 y una diversificación productiva enfocada a las energías limpias y sostenibles».

Asimismo, el vicepresidente ha remarcado el hecho de que «nos encontramos en una emergencia climática. Esto lo tenemos que tener en cuenta, puesto que no solo afectará al territorio, no solo afectará a las zonas costeras, sino que tendrá consecuencias socioeconómicas a las que también tendremos que hacer frente».

Por su parte, el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, ha señalado que “las conclusiones de este informe son un toque de atención importante” y ha asegurado que “la clase política y los agentes económicos y sociales ya no tienen excusa para seguir mirando hacia otro lado”. En este sentido, ha apostado por “un cambio de modelo territorial en la línea del espíritu del decreto 9/2020” y ha añadido que “ahora más que nunca, es muy urgente que las Illes Balears asuman las competencias de costas y litoral para poder tener las herramientas necesarias para proteger el territorio de una realidad que, tal como demuestra este estudio, será palpable muy pronto”. Con todo, ha pedido “no caer en una visión alarmista o catastrofista del futuro” y ha apostado por “una colaboración activa y dinámica entre las administraciones y el mundo científico para buscar y ejecutar las soluciones necesarias para asegurar a las generaciones futuras que esta tierra seguirá siendo sinónimo de calidad de vida”.

Según el estudio, para el año 2050 se prevé que el ascenso menos adverso del nivel medio del mar inunde, como máximo, 388 hectáreas de forma permanente y 188 de forma eventual, lo que afectaría a 619 y a 1.453 personas, respectivamente. Por otro lado, en el escenario más adverso, afectaría a 833 hectáreas de forma permanente y a 204 de forma eventual, asociadas al acontecimiento extremo con periodo de retorno de cien años (p. e. tormenta marina con periodo de retorno de cien años). Ello implicaría una afectación directa sobre 788 personas de manera permanente y 1.766 de forma temporal.

Para el año 2100 se prevé que el ascenso, en el escenario menos adverso y asumiendo que se reducen emisiones de gases de efecto invernadero, afecte a 2.664 hectáreas inundadas de forma permanente y a 352 hectáreas de forma temporal. En este sentido, afectaría a 5.647 y a 3.010 personas, respectivamente. Por otro lado, el escenario más adverso del nivel medio del mar se prevé que afecte como máximo a 3.465 hectáreas de forma permanente y a 427 hectáreas temporalmente, asociadas al acontecimiento extremo con periodo de retorno de cien años. Ello implicaría una afectación directa sobre 9.599 personas de manera permanente y 4.091 de forma temporal.

De entre las infraestructuras críticas, el elemento más susceptible de sufrir daños en cualquier escenario será el viario de titularidad municipal y/o privada, seguido de la red eléctrica en un sector muy localizado de la bahía de Alcúdia. Asimismo, los modelos de erosión de playas apuntan que parte del cableado de conexión eléctrica entre Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera será desenterrado en la zona más terrestre. También se verán afectadas algunas infraestructuras, como la planta de tratamientos de aguas de Muro y parte del cementerio de Mahón.

En cuanto al sistema natural, entre los espacios de relevancia ambiental de las Illes Balears, S’Albufereta de Pollença y S’Albufera de Mallorca pueden llegar a perder entre el 70 y el 90 % de su superficie actual. Además, 66 espacios de la Red Natura 2000 presentarán problemas asociados con el ascenso del nivel del mar. A pesar de ello, la inundación permanente casi no afectará al suelo de uso agrícola e industrial, dado que se producirá el mayor impacto en el suelo de uso residencial.

Ante el alcance del impacto del ascenso del nivel del mar previsto para 2050 y 2100 en las costas arenosas de las Illes Balears y a la luz de los resultados aportados en este estudio que se presenta, la Vicepresidencia y Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática y la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio, consejerías implicadas en Costas por el Cambio, proponen adoptar como línea estratégica incidir en la viabilidad de soluciones de protección natural, acomodación y/o retroceso de las playas antes de desarrollar estructuras de protección artificial que solo supongan una respuesta o solución a corto plazo. Además, insisten en la necesidad de que las medidas de adaptación que se consensúen sean una oportunidad para mejorar las zonas costeras de las Illes Balears.

Hay que señalar que Costas por el Cambio es una iniciativa del Govern de las Illes Balears, concretamente de la Vicepresidencia y Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, que surge ante los primeros resultados que ha obtenido la ICTS SOCIB (Sistema de Observación y Predicción Costero de las Illes Balears), sobre los impactos y el riesgo asociado al ascenso del nivel marino y a los acontecimientos marinos extremos atendiendo a los escenarios del IPCC (The Intergovernmental Panel on Climate Change, en castellano, Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático).

La evaluación se ha desarrollado en el sector de costa asociado a 464 playas arenosas del archipiélago. Sin embargo, a efectos de modelización de la pérdida de superficie de playa seca y su derivada de prestación de servicios ambientales en términos de recreación, se ha considerado una población de 163 playas.

Más información en el siguiente enlace: https://youtu.be/8jLAdsgdjfg