31 julio 2018 | <9ªL> Conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca

El Govern planifica con los ayuntamientos el control y tratamiento de la oruga peluda NNota Informativa

El Govern planifica con los ayuntamientos el control y tratamiento de la oruga peluda

El IBANAT ya ha instalado un millar de trampas en las zonas afectadas de Mallorca
La Conselleria de Medio ambiente, Agricultura y Pesca se ha reunido hoy con los municipios afectados por la oruga peluda (Lymantria dispar) para planificar conjuntamente las actuaciones que se llevarán a cabo durante todo el ciclo de vida del insecto, desde ahora hasta el 2019. El Pla de Mallorca y la Serra de Tramuntana han vivido un rebrote importante en los últimos meses en unas 4.000 hectáreas, con diferentes niveles de afectación. Por eso, el conseller de Medio ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, acompañado de la jefa de servicio de sanidad forestal, Sandra Closa, han explicado a los ayuntamientos los diferentes tratamientos que existen para controlar este insecto, que deshoja las encinas. El objetivo de la reunión, según ha explicado Vicenç Vidal, “es, una vez detectada por primera vez la plaga este año en Mallorca, evitar su efecto exponencial de cara a las próximas temporadas”. 

Desde que se inició este rebrote en el mes de mayo el Instituto Balear de la Naturaleza (IBANAT) ya ha comprado e instalado un millar de trampas y feromonas para la captura masiva de mariposas en zonas afectadas. Estas zonas han sido delimitadas por la Dirección general de Espacios Naturales y Biodiversidad de la Consellería de Medio ambiente, Agricultura y Pesca, la cual ha ido elaborando un mapa de afectación con la delimitación de zonas afectadas y niveles de afectación. Los municipios de Costitx, Inca, Sineu y Llubí fueron los primeros afectados en el mes de mayo y después se ha expandido en la zona centro (Lloret, Sant Joan, Muro, Algaida y Vilafranca) y en la Tramuntana (Valldemossa, Esporles y Bunyola). Por otro lado, se han instalado 130 trampas para la monitorización de la especie en Mallorca y Menorca, y se ha asesorado a particulares y ayuntamientos afectados. 

Este insecto tiene cíclicamente estas explosiones cada 20 o 30 años y hasta ahora se habían ido registrando pequeños focos que se habían controlado con trampas y pequeños tratamientos terrestres muy puntuales. El último tratamiento que había sido necesario fue en 2005 en una veintena de hectáreas en Artà.