El conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, y el director general de Espacios Naturales y Biodiversidad, Llorenç Mas, han visitado, este jueves, la comuna de Caimari, en Selva, donde el servicio de Gestión forestal está ejecutando tareas de restauración ambiental de los hábitats forestales afectados por el temporal «Juliette». Esta es una de las actuaciones de emergencia que se están ejecutando desde el mes de abril en el marco de una encomienda de gestión a la empresa TRAGSA por un importe total de 540.085 euros y que, hasta ahora, ha permitido restaurar ambientalmente una superficie de 25 hectáreas en los municipios de Fornalutx, Escorca, Felanitx y Selva..

Mir ha anunciado que, esta misma semana, ha firmado una resolución que destina 1,3 millones de euros más a la restauración de los daños provocados por Juliette. «De este modo, garantizamos que habrá presupuesto al menos hasta 2025», ha asegurado recordando que «desde el primer día la consejería ha venido trabajando ininterrumpidamente en las zonas más dañadas por el temporal».

En un primer momento, las brigadas disponibles del IBANAT se pusieron a las órdenes de la dirección general de Emergencias trabajando sobre todo en la apertura de la red viaria afectada. Una vez restaurada la normalidad en las carreteras, el IBANAT destinó a entre 60 y 80 personas a los sitios más afectados, actuando sobre una superficie de 55 hectáreas entre las cuales se incluyen la carretera Caimari-Lluc, las áreas recreativas más afectadas y sus alrededores y los caminos que atraviesan las fincas públicas de la Serra de Tramuntana. A partir del 1 de mayo, las brigadas del IBANAT se centraron en el operativo de extinción de incendios forestales mientras TRAGSA como medio propio continuaba las tareas de restauración que se prevé que todavía puedan restaurar unas 20 hectáreas más que habrá que sumar a las 25 ya ejecutadas.

La nueva encomienda de gestión se centrará en cuatro líneas prioritarias: fajas de defensa y puntos críticos, extracción de arbolado afectado dentro de los hábitats forestales, prevención de plagas forestales y colocación de trampas y seguimiento de la masa forestal afectada. Se prevé actuar sobre una superficie de unas 100 hectáreas.

Mir ha recordado, sin embargo, que, más allá de estas 200 hectáreas previstas en total, hay que tener en cuenta que, a partir de octubre, las brigadas del IBANAT se podrán reincorporar a recuperar parte de los hábitats forestales afectados por Juliette. El conseller ha querido agradecer «el enorme esfuerzo y la profesionalidad de todos los trabajadores».

Mir ha recordado que todos los trabajos previstos se ubican, por norma general, en fincas públicas o bien en fincas privadas que, según el IV Plan general de defensa contra incendios de las Illes Balears y los correspondientes Planes Comarcales, presenten puntos críticos, caminos de la red de fragmentación o fajas de prevención de incendios. Por otro lado, según ha recordado, las personas propietarias de fincas afectadas se pueden beneficiar de las subvenciones del Consorcio Serra de Tramuntana y también de las que está previsto que tramite el FOGAIBA

Finalmente, Mir ha lamentado que «una vez más, el Estado no está respondiendo con la celeridad necesaria» y ha reclamado que responda, de una vez, a la petición de declaración de la isla de Mallorca como zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, aprobada en el Consell de Govern del 13 de marzo.