"...En silencio, sin una palabra más alta que la otra, te continuamos buscando. No olvidamos fácilmente una injusticia como la que se cometió contigo ni con la gente que, como tú, intentaba hacer algo mejor el mundo con ideales legítimos para un obrero del gremio del zapato..."

 

"...Nosotros no queríamos ser héroes ni víctimas por culpa de tu desgraciada muerte y, de algún modo, lo fuimos. ¿Cabeza alta? ¡Siempre! ¿Qué daño hiciste? No puede ser de otra manera..."