21 diciembre 2017 | <9ªL> Consejería de Cultura, Participación y Deportes

El Plan de Actuación de Fosas para el año 2018 incluye 10 intervenciones, entre las cuales, la segunda fase de Porreres y Montuïri NNota Informativa

El Plan de Actuación de Fosas para el año 2018 incluye 10 intervenciones, entre las cuales, la segunda fase de Porreres y Montuïri

Se prioriza las fosas de Calvià, Sencelles, Marratxí, Alaró, Llucmajor, Santa Maria, Deià, ses Figueretes (Eivissa) y, por primera vez, dos pozos
La consellera de Cultura, Participación y Deportes, Fanny Tur, durante su intervención en el debate parlamentario del Proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la Comunitat Autónoma de las Illes Balears para el año 2018 ha avanzado, este jueves, el Plan de Actuaciones de intervenciones de fosas para el año que viene, aprobado por la Comisión Técnica de Personas Desaparecidas y Fosas, que depende de la Conselleria, el pasado 13 de diciembre de 2017.

El Plan de Actuación 2018 incluye la segunda fase de la exhumación de la fosa de Porreres y, además, la intervención de las siguientes fosas que seguirán el orden de prelación que se muestra a continuación:
  1. Fosa de Montuïri.
  2. Pozo de Son Lluís (Porreres) / Pozo de s'Àguila (Llucmajor).
  3. Fosa de Sencelles.
  4. Fosa de Calvià.
  5. Fosa de Marratxí.
  6. Fosa de ses Figueretes o del Cementeri Vell (Eivissa).
  7. Fosa de Alaró.
  8. Fosa de Llucmajor.
  9. Fosa de Santa Maria.
  10. Fosa de Deià.
Así mismo, y de forma paralela, en el Plan de Actuación se incluirán los certificados de viabilidad de las fosas de Manacor y de la fosa de Bunyola.

Para establecer el calendario de intervenciones de las fosas que forman parte del Plan de Actuación 2018, como ya se hizo con el del 2017 y de acuerdo con criterios acordados por la Comisión Técnica en la reunión del 26 de abril de 2017, se realizó una revisión de los mismos:
  • Existencia de certificación de viabilidad de exhumación o que se considere viable en el Mapa de Fosas.
  • Existencia de petición por parte de familiares de primera generación vivos, y si no hay, de segunda generación.
  • Existencia de petición por parte del Ayuntamiento o representantes municipales afectados (sea para encontrarse la fosa en su municipio o para tener vecindarios de su municipio en otras fosas), así como peticiones de entidades o colectivos de víctimas.