21 septiembre 2018 | <9ªL> Conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca

Consell de Govern: SE APRUEBA LA REVISIÓN ANTICIPADA DEL PLAN HIDROLÓGICO DE LAS ILLES BALEARS CConsell de Govern

Consell de Govern: SE APRUEBA LA REVISIÓN ANTICIPADA DEL PLAN HIDROLÓGICO DE LAS ILLES BALEARS

\ El Consell de Govern remite la revisión al Consejo Balear del Agua
\ La aprobación de la revisión por el Consejo de Ministros evitará una multa europea

El Consell de Govern ha aprobado con carácter inicial la revisión anticipada del Plan Hidrológico de las Illes Balears y la enviará al Consejo Nacional del Agua para que emita el correspondiente informe favorable antes de que la apruebe el Consejo de Ministros. De esta manera se cumple el compromiso adquirido con la Comisión Europea de revisar el Plan Hidrológico de manera anticipada para corregir las deficiencias que han detectado en el mismo los técnicos europeos.
 
El Gobierno español incumplió el calendario del ciclo de planificación hidrológica (entre los años 2009 y 2015), ya que aprobó los planes de las comunidades autónomas entre los años 2013 y 2014, cuando se tenían que haber aprobado en el 2009. Para evitar una sanción, se acordó con la Comisión Europea que se cumpliría el plazo previsto del segundo ciclo de planificación (2015-2021). Estos planes deberían tomar en consideración, asimismo, las deficiencias detectadas por los técnicos europeos, lo que el Gobierno anterior no tuvo en cuenta cuando redactó el Plan vigente.
 
Las observaciones de la Comisión Europea hacían referencia explícita al Plan Hidrológico balear, en concreto, a la ausencia de actualización del estudio de presiones y evaluación de los costes del ciclo integral del agua; a la falta de seguimiento de las masas de agua superficiales; a la insuficiencia de medidas de reducción de nitratos en las masas subterráneas y de recuperación de costes, y, sobre todo, a la falta de medidas de protección de las masas de agua subterránea objeto de sobreexplotación.
 
Por ello, en la revisión del Plan Hidrológico de las Illes Balears se incorporan los datos del análisis de la recuperación de los costes de los servicios del agua, y se analizan e incorporan las presiones sobre todos los tipos de masa, que van desde las embarcaciones por aguas costeras hasta la sobreexplotación y la contaminación por nitratos de las subterráneas, pasando por los vertidos de las depuradoras en torrentes, entre otros.
 
También se ha revisado el estado de las masas de agua subterráneas —se han actualizado los datos de consumos, disponibilidad, calidad y demanda—, se han reanudado las tareas de monitorización de las aguas superficiales y se han establecido medidas de gestión de la demanda.
 
Se han adoptado medidas normativas para la protección de las masas de agua subterránea sometidas a sobreexplotación, para evitar la intrusión marina y la contaminación por nitratos. En concreto, la revisión del Plan recoge la prohibición de nuevas autorizaciones y concesiones que afecten masas con sobreexplotación, que son aquellas de las que actualmente se extrae más agua de la que entra en el acuífero, para todos los usos. En estos acuíferos, excepcionalmente, se podrán otorgar concesiones de hasta 10.000 m3 anuales para explotaciones agrarias preferentes, siempre que la masa muestre una tendencia a la mejora del estado cuantitativo.
 
También quedan excluidos de esta medida el abastecimiento para depósitos contra incendios, los aprovechamientos para abastecimiento de la población (siempre que no haya fuentes alternativas de abastecimiento) y los usos no consuntivos, como la geotermia, la reordenación de las captaciones sin aumento de volumen, el mantenimiento y el saneamiento de pozos.
 
Asimismo, se establece la obligación de utilizar agua desalada para uso urbano en los núcleos donde no se cumplen los requisitos mínimos sanitarios con acceso a la red; se toman medidas para evitar la intrusión marina y la salinización de los acuíferos; se recoge el Plan de Gestión de Uso Sostenible del Agua Municipal, que prevé el Plan de Sequía, y se toman medidas de protección contra la contaminación por nitratos provenientes de la urbanización difusa.
 
Además, la revisión del Plan recoge la actualización de la cartografía de las zonas húmedas naturales e identifica otras potenciales, además de declarar nueve reservas fluviales.
 
También se establecen medidas de gestión de la demanda, como la reserva de recursos para la Administración con fines ambientales. Así, por ejemplo, los excedentes actuales de la masa de Ses Fonts Ufanes se reservan para que lleguen a S’Albufera directamente o indirectamente, y se aumentan los requisitos para la obtención de derechos, con la obligación de presentar la cédula de habitabilidad para obtener la concesión de suministro de uso doméstico en suelo rústico.
 
También se prohíben la concesión de autorizaciones o las concesiones de aguas subterráneas para instalaciones deportivas con superficie de riego de tres o más hectáreas. Estas infraestructuras solo podrán satisfacer la demanda de agua con aguas residuales regeneradas o desaladas, con uso prioritario de las depuradas. Esta es una iniciativa que la revisión anticipada del Plan también recoge.
 
Durante la tramitación del Plan se ha fomentado la participación pública con la activación de las juntas insulares del agua y la celebración de reuniones de participación y de carácter sectorial con representantes de diferentes sectores y administraciones, de las que se han recibido un total 126 documentos de aportaciones con múltiples observaciones y alegaciones.
 
Algunas de las aportaciones que se han incluido en el texto definitivo hacen referencia a la inspección técnica de pozos para grandes consumidores, a la reducción del porcentaje permitido de pérdidas en las redes de abastecimiento —que desciende del 30 % al 25 %, y al 17 % a partir del año 2021—, o a la ampliación de medidas de gestión de la demanda, como instalar grifos de bajo consumo no solo para oficinas, hoteles y edificios públicos, sino también para viviendas turísticas, o la gestión de pluviales en suelo rústico.
 
Otros aspectos que se han tenido en cuenta en la revisión son el desglose del programa de medidas por islas, la promoción de las energías renovable en las instalaciones y la incentivación de la compra de agua desalada en invierno, con un precio más bajo que en verano.
 
Cabe recordar que el Consejo Balear del Agua, máximo órgano de participación de la Administración hidráulica, en el que hay representantes de todos los actores involucrados en el ciclo integral del agua, el viernes pasado informó favorablemente sobre esta revisión, igual que la Comisión de Medio Ambiente de las Illes Balears. De hecho, durante la tramitación ambiental se han añadido otras mejoras, como la obligatoriedad de utilizar aguas pluviales o regeneradas en los jardines públicos y de fomentar las especies autóctonas y de bajo requerimiento hídrico, además de la previsión de erradicar especies invasoras durante las tareas de limpieza de los torrentes.